tu libertad financiera a través de la inversión pasiva
¿Qué es la inversión pasiva y cómo nos puede ayudar a alcanzar la libertad financiera?
Tu estrategia para la inversión pasiva
¿Cuál es la estrategia que más te conviene? Si estás leyendo esto, deduzco que te has puesto como firme objetivo alcanzar tu independencia financiera a largo plazo. Esta libertad se puede equiparar con una pensión de jubilación: no trabajas, pero obtienes de una fuente fiable todo el dinero que necesitas para vivir, manteniendo al mismo tiempo el riesgo de pérdida lo más bajo posible.
También sabes que los gastos de transacción asociados con cada compra y/o venta de valores reducen tu rentabilidad – puesto que es dinero que gastas en lugar de invertirlo y permitir que el efecto de interés compuesto trabaje en tu favor. Además, has aprendido lo difícil o imposible que es batir al mercado, es decir, rendir mejor que el índice. Todo indica que para ti (y para mí también) la estrategia de «inversión pasiva», es la estrategia más adecuada.
¿Pero qué significa «inversión pasiva» exactamente?
Los expertos en inversión pasiva, lo definen de la siguiente manera:
«Inversión pasiva» consiste en invertir basándose en una estricta y disciplinada filosofía de compra y mantenimiento (buy-and-hold) a largo plazo, para obtener sistemáticamente un porfolio globalmente diversificado compuesto únicamente de activos de índices de bajo costo (fondos de índice, ETFs). Esta estrategia no persigue el objetivo de tratar de superar el mercado.
Recapitulemos por un momento, porque es esencial que entiendas la diferencia para que sepas lo que estamos haciendo y lo que pretendemos lograr más adelante.
Invertir pasivamente significa en este contexto, abstenerse deliberadamente de estrategias de inversión activa, como la selección de valores (Stock-Picking) o el llamado Market-Timing (esperar el momento adecuado para comprar/vender un producto), las cuales acarrean poco éxito y alto riesgo. Las estrategias enumeradas, Stock-Picking y Market-Timing, son estrategias para inversores activos que desean batir los índices.
La inversión pasiva a largo plazo obtiene en general mejor rentabilidad que la inversión activa, reduciendo al mismo tiempo el nivel de riesgo.
➡ Stock-Picking
Consiste en elegir y comprar acciones, asumiendo que en realidad valen más que su precio de compra actual en el mercado de valores, con la esperanza de poder venderlos después a un precio más alto.
➡ Market-Timing
Consiste en encontrar (o más bien adivinar) el supuestamente mejor momento de compra y/o venta de un producto. Digamos que hoy compras una acción de Inditex por € 30,00 con la esperanza de que muy pronto suba considerablemente en valor. Los gastos de compra con un bróker online rondan los € 4,90 por transacción. Tu acción sube a € 35,00 en el plazo de un mes – lo cual supone un 16% de aumento = ganancia.
Ahora bien, alentada por este pequeño triunfo, te apegas a la ilusión de que las acciones subirán aún más en el próximo mes y por lo tanto no vendes. Ahora imagina que a Amancio Ortega (fundador de Inditex) lo arrolla una avalancha de nieve durante sus vacaciones de ski (¡Dios no lo quiera, pero estas cosas pasan! 🙈). A consecuencia de este fatal accidente, las acciones de Inditex caen en picado hasta un valor de tan sólo € 5,00.
A ti te entra pánico y vendes. Esta venta te costará nuevamente otros € 4,90. Así pues, has comprado a € 30,00, vendido a € 5,00 y gastado € 9,80 en costos de compra y venta. Tu pérdida total sube a € 34,80.
¿Qué te parece esta pequeña historia de terror? Por supuesto esto a ti no te va a suceder, porque ahora estás muy bien informada sobre la bolsa y las acciones, y sabes lo importante que es invertir de manera racional y con un plan para minimizar riesgos. Por desgracia, la mayoría de los inversores privados practican una estrategia tan activa como la descrita anteriormente – “juegan” al póker sin saber que se encuentran en la mesa de la ruleta. Pero tú no eres una jugadora sin estrategia ni conocimientos, tú eres inversionista. 💪🏼😎
La estrategia pasiva
Lo contrario a la especulación a corto plazo es la llamada filosofía de comprar y mantener (buy-and-hold). Como su nombre indica, compramos y mantenemos. Mantenemos no solo por 2 ó 7 años, sino como mínimo 10 ó incluso 50 años. Cuanto más tiempo mejor, porque está comprobado científicamente, que cuánto más tiempo se mantiene una acción, la probabilidad de que alcance la tasa de rentabilidad esperada, aumenta.
💡 Tiene sentido: si mantienes una acción sólo dos semanas, la probabilidad de que produzca una buena rentabilidad en exactamente esas dos semanas es menor. Es más, sería tan probable como encontrarte un elefante en tu bañera. 🐘
Pero si mantienes acciones por más de 20 años, las probabilidades de que produzcan la rentabilidad esperada e incluso la superen, son bastante más altas. Los expertos llaman este fenómeno: regresión a la media.
La clave de la inversión pasiva: diversificación
Cuando los expertos hablan de «diversificación amplia y sistemática», se refieren a que se debe considerar el mercado de acciones globalmente y en su totalidad – incluyendo por ejemplo mercados emergentes (emerging markets). Ya habrás tropezado varias veces con el concepto de diversificación en este blog (y si no, pues deberías de leer rápidamente estos artículos: 3 buenas razones para invertir en bolsa, acciones: conocimientos básicos y 8 errores de principiante en bolsa).
☝🏼🧐 No me cansaré de decirlo: la diversificación es el recurso más efectivo para la minimización de riesgo. Poner todos tus huevos en una canasta es un error fatal. Por consiguiente, la inversión pasiva debe implicar una máxima diversificación global: por regiones/países y por tipo de empresas y tamaño (el status quo de tus bienes en función de tu asignación de activos ya lo averiguaste aquí). Por lo tanto, no sólo deben haber acciones de empresas en tu porfolio, sino también otros tipos de activos como materias primas, bonos del estado e inmuebles.
En conclusión: en el porfolio de una inversionista que persigue una estrategia pasiva, no encontraremos acciones individuales, sino más bien ETFs. Y eso es exactamente a lo que nos vamos a dedicar en detalle de ahora en adelante. ¡Allá vamos! 🚀